jueves, 9 de junio de 2011

Malevolente deidad.

Me perforas una y otra vez fríamente.
Cortas el pensamiento flagelando mis sentimientos.
La ironía pareciese un mangar el cual se consume día con día.

No se por que motivo sucede y me caga.
Por que no solo deja de suceder... por que no puedo hacer lo mismo que tu.
No se que soy y no lo deseo saber.
Lo que se es lo que sabes, lo que soy es lo que conoces...
Fuera de todo en verdad dudaste, te engañaste y  desconfiaste.
Crucificaste mi corazón,
sodomizado vaga por caminos oscuros.

Rompiste todas mis cuerdas, enmudeciste mi sonido y me provocaste ceguera.

Brindo mi vida por hacerte sentir todo esto!
Amaría cada rincón de tu pensamiento!
Te ahogaría en mis mares de sentimiento.
Gritarías y exclamarías al tocar mi piel!
Cambiando tu respiro en suspiros, mis suspiros.
Secaría por completo tus ojos, que nunca mas se derramaran lagrimas.

Zacear todos tus placeres al máximo!
Te devoraría una y otra vez!
Me convertiría en algo inmenso para que así vivieras en mi.
No debo de estar aquí tal vez... me tienes que odiar o amar...

Pareciese un martirio mas no lo es...

Lo peor es que quizás nunca lo comprenderé, al tiempo le es ajeno.

Solo se que esto:
Amor, Dolor, Felicidad, Placer y demás...

Lo generas solo tu...Perdona mi rebeldía... pues aveces sufro de tu poder...
Solo un creyente de una religión única, desconocida.
Solo una diosa portadora de el alma y el ser de alguien moribundo

Las letras ya no forman lo que en verdad anhelan, se han rendido ante el sentimiento.
Y su derrota se transforma en su propio silencio...

Bastan solo palabras para acabar con este sujeto y viceversa...

He perdido de vista una vez mas, mi propio rumbo...


Emman.



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